lunes, 25 de febrero de 2013

Enanos toreros

Viendo Blancanieves de Pablo Berger recuperé una pequeña historia olvidada, la de aquella vez que fui a ver al Bombero Torero. Mi abuelo llamaba a aquel espectáculo "La Charlotá", supongo porque aparecía un cómico haciendo de Charlot. Creo que en mi pueblo todo el mundo decía "La Charlotá", en un tiempo ya olvidado.

Mi abuelo me convenció para ir, un día de Feria. Me describió un espectáculo tan brillante y divertido que cualquiera se resistía. Mi abuela preparó la merienda y yo recuerdo un bocadillo de algo delicioso. Y quizás Fanta o Mirinda. Recuerdo que mi única preocupación, antes de entrar en la Plaza, era si haría mucha calor, porque teníamos asientos de Sol y Sombra. Recuerdo que mi abuelo contaba horrores de los asientos de Sol -te asabas a las cinco en junio- y que los asientos de Sombra eran muy caros. Supuse que la decisión de Sol y Sombra era la más acertada: era muy listo mi abuelo.

Creo que ha sido la única vez que he visto un espectáculo taurino, aquella tarde del Bombero Torero. Recuerdo sol -poca sombra- y muchísima gente, muchos niños como yo, con abanicos, gorrillas, aquellas almohadillas y chavalines vendiendo pipas. Recuerdo que yo pensaba obsesivamente en aquellas sevillanas de Manolo Escobar que ya de tan pequeña me parecían el colmo de la ordinariez.

Recuerdo que no me divertí. Que me sentí triste y bastante rara porque se supone debía reírme con aquellos enanos que daban volteretas y tropezones, reirme como todos los niños en aquella Plaza se reían, pero carajo, yo no era capaz. Supongo que me pareció un espectáculo tan desolador que procuré olvidarlo. Y sin embargo cuando ayer recordé esa tarde, viendo Blancanieves, sentí una extraña alegría.

8 comentarios:

May Mercurio dijo...

El tiempo produce a veces que al retornar a los recuerdos de una manera no buscada, como tú viendo la pelí(por cierto, te ha gustado? a mí me pareció tierna y un cuento con encanto y original, no me va el mundo taurino, soy bastante sensible al sufrimiento de los animales, pero omití eso al verla y la verdad es que salí del cine satisfecha, me gusto, sí)que te condujo a recordar a tu abuelo y el espectàculo de los enanos que no te agrado pero que lo recordarás te despertará esa extraña alegría..es como un alga que esta seca, la metes en agua, se hidrata, agarra volumen.
Besos!!!

m dijo...

Aún no la he visto, y no se si lo haré, yo es que soy de las clásicas, blancanieves con su vestido largo, la madrastra en su castillo y cada uno en su sitio, en realidad no me gustan las versiones modernas de nada, a mi tampoco me gusta ese tipo de espectaculos porque siento tristeza, no consigo verlo desde la perspectiva humorística, es como la que han echado de gran hermano que llora y ronca tanto, y tiene un caracter insoportable, tendrá todo lo que ella quiera, pero no dejo de entristecerme como se rien de ella desde fuera ( no veo gran hermano, pero no hay mas cojones que ver en algún momento un post entre noticias y peli)

beso enorme

Anónimo dijo...

Estimada, tampoco nunca me gustaron las reuniones multitudinarias, el griterío y esa grosería innecesaria que invariablemente acompaña a Toda manifestación masiva. Tal vez por esa misma razón nunca me gustó el circo, paradójicamente sí el fútbol, aunque hace décadas que no piso una "cancha", pero en el fútbol influye la pasión que redim e casi todo.

Igual lo del espectáculo es lo de menos, lo interesante, lo conmovedor, es el recuerdo cariñoso de tus abuelos.

Un beso grande

Unknown dijo...

Yo tambien tengo el recuerdo de haber ido de pequeña a "La Charlota" en la zona donde vivo se conoce asi, ademas en mi caso era mi abuela la que nos regalaba las entradas a mis hermanos y a mi para la Feria de mi ciudad; era una especie de tradicion pero ese recuerdo va conmigo.Saludos

Mar dijo...

La película me gustó mucho, incluso viendo que no es redonda, pero tiene momentos mágicos. Y magia es lo que le pido al cine.

El hecho de recuperar ese recuerdo ha sido parte de la magia.

Besos!!!!!!!!

Mar dijo...

Yo tampoco me río con el ridículo ajeno ni con ciertos espectáculos grotescos. Sobre el tema de los enanos toreros, hubo una polémica hace unos años- Yo, que creo en la libertad individual, pienso que la dignidad se la gana cada uno, seas enano torero o seas cirujano.

Besos.

Mar dijo...

Peculiar esa redención que haces del fútbol; un taurino dirá lo mismo, dado que para ellos el toreo está lleno de pasión. Estaría bien un post sobre ello, me quedé con ganas de que desarrolles la idea.

Una de las bendiciones que han acompañado mi vida han sido mis cuatro abuelos. Fueron buenos y los quise mucho.

Besos.

Mar dijo...

Yo creo que sólo fui una vez, no me gustó mucho. Lo de Charlota sería por Charlot,y por cierto, tampoco soy muy charlotiana, yo (se que es una herejía, pero soy más de Buster Keaton, más seco y serio y menos sentimental).

Saludos y bienvenida a este blog.