martes, 24 de abril de 2012

Leer a escondidas

Era un placer, leer a escondidas.

Un libro debajo de la almohada, mientras simulas que estás dando el repaso de última hora al examen de mañana.

Un Mortadelo debajo de los apuntes.

A escondidas, el Interviú, el Lib que mis padres guardaban bajo el asiento de un sillón. Aprovechando que mi madre salía a la compra. Diez, veinte minutos agónicos.

Mientras limpiaba el polvo del mueble-bar del salón, un repaso a hurtadillas del Gran Libro de la Sexualidad Humana. ¿Un pene por dentro? ¿La palabra clímax? ¿Caricias? Limpiar el polvo era mi trabajo doméstico favorito.

Cómics pornográficos que prefieres que no te vean leer porque ... ¿porque no eres de esas que se excitan a las primeras de cambio con una viñeta bizarra? ¿Ni de esas que usan el porno para masturbarse?

Pero qué placer.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mis padres tenían el interviu en la respisita de la mesa de centro en el salón, todos en bloque, aún recuerdo cuando vi las fotos de Bibiana y su pene antes de operarse, no tuve mas remedio que preguntar.....
Besitos

Mar dijo...

Calla, calla, que de aquello de Bibiana escuché cosas, pero el Interviú aquel ni lo caté. Yo creía que era una leyenda urbana...

Mar dijo...

Calla, calla, que de aquello de Bibiana escuché cosas, pero el Interviú aquel ni lo caté. Yo creía que era una leyenda urbana...